PAQUETE DE MADURO
MÁS CAPITALISTA, IMPOSIBLE
Más allá de cualquier consideración afectiva, se trata de un paquete
capitalista. Maduro supera al Fondo
Monetario Internacional. Ni siquiera
contempla medidas compensatorias a los más desfavorecidos. Es por ello que
muchos economistas se enredan. Otros son más francos, piden más. Otros nos
hablan de que el aumento en el precio de la gasolina debe ajustarse… pero no
tanto. Otros, que no es el momento. Pero no dicen que es injusto y arbitrario.
Que mientras le quitan impuestos a los importadores y dueños de medios, ahogan
al trabajador. Que el precio de la gasolina, su “regalo”, es populismo. Que la
eliminación del control de cambio es parcial y debe ser total. Que es
dolarización, pero debe haber disciplina fiscal. En fin, piden más.
Sin dudas, podemos concluir en que el paquete Maduro se trata de una
salida de carácter liberal y entreguista. Al menos a ver si logran frenar la
inflación y cuadrar cuentas para pagar deudas a chinos, rusos, gringos y
europeos. Una salida capitalista en toda regla que afianza el carácter
dependiente y semicolonial de Venezuela. Inicialmente dolariza, aunque deja
abierta la posibilidad de cambiar al yuan, cuestión que revisarán en la medida
en que el yuan desplace al dólar como reserva de valor y referencia. Si no se
da, mientras esperan, se aguantarán atados al Dios dólar.
Resulta interesante eso de la diferencia entre la reconversión y el
cambio de signo monetario. No es cualquier cosa el asunto. Entendemos por
reconversión lo de la adecuación que hizo Chávez en su oportunidad. Ante la
inflación galopante quitó los ceros. Pero en esta oportunidad, como vemos en la
cotidianidad, el incremento de precios obliga a quitar ceros y más. Se incluye
en este incremento, los precios acordados por el Gobierno con algunos
empresarios. La implantación del nuevo signo trae incremento de precios muchas
veces superiores a los producidos por la inflación de los últimos días antes de
este nuevo período iniciado el 20 de agosto.
Una cosa es dolarizar y otra sostener los precios, frenar la inflación.
El primer envión del incremento de precios es por dolarización y especulación,
ciertamente. Inflación se producirá si emiten dinero sin respaldo, inorgánico.
Muchos hacen sinonimia entre aumento de precios e inflación. Pero no. No todo
incremento generalizado de precios es por inflación. Estamos frente a un caso
conspicuo al respecto. Se ha producido un incremento generalizado, pero no se
ha emitido aún tanto dinero como para hablar de inflación. Podemos decir que
algo del incremento es por el remanente de masa monetaria que aún queda del
viejo cono, pero no creemos que sea de tanta significación como para haber
elevado tanto los precios. Además, es dinero súperdevaluado. Ya veremos si
logran frenar los precios, aunque comienzan mal, muy mal.
SALARIOS DE
HAMBRE Y HACIA ABAJO
Si hubiesen dolarizado el
salario hasta colocarlo al de Bolivia o Chile, de unos 300 a 400
dólares, la cosa fuese distinta. Pero, dolarizaron, sí, a 30 dólares, por lo que sigue siendo el
más bajo de América Latina y de los más bajos del planeta.
Salario mínimo a 1.800 soberanos, pero ya el Gobierno busca crear una
nueva tabla. Refleja que algo o mucho hay de improvisación. Hay cosas que se
les van de las manos. Un respeto a la tabla vigente daría como resultado que
algunos sectores se viesen un tantico favorecidos. Tanto, que les permitiría
crear demanda efectiva mayor de la imperante. Por ejemplo, un docente universitario de máximo
escalafón pudiese devengar unos 500 dólares. No alcanza al que devenga
cualquier docente de máximo escalafón en otro país de América Latina, pero es
algo. Puede frenar la migración de docentes con alto nivel de formación.
Igual sucede en la Fuerza
Armada, por lo que Padrino López le salió al paso explicando que no se
alegren, que crearán una nueva tabla donde seguramente quien devenga 10
salarios mínimos, pasará a percibir apenas 5, o 4. Pero nunca lo que debería
ser, 10 salarios mínimos, dijo el ministro. Se refirió al sueldo que devenga un
teniente, para aclarar el asunto. Que era inviable eso de mantener la tabla
vigente. Eso sí, será respetada la escala de pobreza y la tendencia a la
pauperación de todos. Bueno, de los que no tienen medios de producción ni están
arrimados al poder.
EL PETRÓLEO
ERES TÚ
Angustia a mucha gente eso del incremento de los costos por el
desmesurado incremento salarial y el peligro en que se pone a la empresa. Ciertamente que los menos
competitivos, quienes no han logrado centralizar capitales que les permita
expropiar a otros expropiadores, se verán en apuros. Pero no necesariamente
como para quebrar.
El ajuste del precio al valor de los bienes y servicios, no se hará
esperar por mucho tiempo. Ya sabemos que el salario será muy bajo. Eso debe
tranquilizar a los dueños de medios y a sus economistas. Que la escala de
salarios no será respetada y que crearán una a conveniencia, para que la
diferencia no sea muy grande entre una escala y otra. Así, los costos no se
dispararán tanto al que se produciría si respetaran la escala vigente.
No se va a producir una nueva distribución de la riqueza. Tampoco se producirá un incremento
del Producto Bruto Interno.
No crecerá el volumen de riquezas a ser distribuida. Es la misma riqueza, o
menos, la que se va a distribuir y sobre la misma base. En ese reparto, los
perjudicados serán los trabajadores. Si los empresarios se ven perjudicados es
porque no podrán incrementar las ventas dado que no crece el número de
compradores, no aumenta la demanda.
Los pobres seguirán recibiendo la misma porción de riqueza y los ricos
igual. Además, penden las amenazas. El precio de la gasolina y los 4 puntos de
más del IVA hacen que los pobres recibirán y se les quitará en mayor
proporción. Allí se evidencia la farsa de que el aumento en el precio de la
gasolina sea para evitar el contrabando. Lo que quieren es más recursos para
equilibrar el presupuesto de ingresos con los gastos. Lo que dan lo quitarán
para crear condiciones para la reproducción de las relaciones imperantes vía
presupuesto de ingresos. Ya
no hay petróleo, pero estás tú.
Y es que el ajuste y equilibrio
fiscal podrán alcanzarlo sí y solo sí, logran evitar la emisión de
dinero inorgánico; además, si logran reducir los gastos. Si logran que los
ingresos sean por la vía impositiva. Más cuando el impuesto sobre la renta tiende a tener menos proporción dada
la depresión económica y las medidas de eliminar arancel a la importación.
Sumemos que nada anuncian en relación con el incremento de la producción.
A su vez, como no pueden tocar la partida para pago a los acreedores y
las correspondientes a Fuerza Armada, reducirán la de educación, salud,
vivienda, entre otras. Nos arrancan lo que nos dan y se deteriorarán aún más
los servicios.
ESPECULACIÓN
Y OTRAS COSAS
La mente capitalista se alimenta de hechos objetivos. Producir y
realizar plusvalía es una cosa objetiva en el marco de las relaciones
imperantes. Las condiciones creadas por esto que han dado en llamar
reconversión, más bien cambio del signo monetario, conducen de manera
inexorable a la especulación.
Aunque es justo suponer que se produce un aumento de precios, tanto por
dolarización como por especulación. Habría que calcular la proporción.
Veamos: Quien vende, compra barato para vender más caro, es “lógico”.
Luego, compra más mercancías que antes para seguir vendiendo. Se cumple aquello
de M-D-M’, donde M’, es mayor que M. Pero, si las condiciones lo permiten,
vende mucho más caro. Es el caso que nos ocupa. La incertidumbre y lo del
“incremento desproporcionado de los salarios”, parece legitimar que muchos
vendedores hagan lo suyo. Esta política lo estimula. Más cuando no se presenta
propuesta alguna que apunte al incremento de la producción.
Sigue habiendo condiciones para la especulación. Se realiza la ética en
correspondencia. No hay cambio de nada. Tanto es así que se sigue vendiendo
dinero en efectivo. Sigue habiendo dos mercados. El de efectivo y el de punto.
El capitalista busca explotar al trabajador al máximo. Con obreros
baratos la cosa se hace mejor. Luego, combinando explotación con la
incorporación de innovaciones en la organización del proceso de trabajo, algún
capitalista puede hacerse más competitivo frente a otros, hasta estar en
condiciones de absorberlos. Es la competencia capitalista. Misma que ha
permitido que Grupos de alimentos
Polar haya superado los 120 rubros en el mercado y siga creciendo.
Así, no todos ganan, pero los grandes, sí.
Con todo, es motivo el paquete en cuestión para que aparezca uno que
otro que lo tilde de “comunista”. “Socialista”, mínimo. No se trata de
ignorancia, que la hay. Se trata de una intención propia del anticomunista. Entre quienes osan quedar en
evidencia como irracionales al servicio de la oscurana, no pueden faltar esos
religiosos que militan en las ideas de Patria, Familia y Propiedad. Profesan con la palabra de Escrivá
Balaguer y lloran y se indignan porque exhumarán los restos de Franco del Valle
de los caídos. En todo caso, cualquier excusa es buena, así sea una política
que se arropa en el socialismo para hacer lo mejor de este capitalismo
dependiente y semicolonial. A ese ínfimo sector antiunitario, lo que parece
importarle es enfrentar al comunismo, no derrotar a Maduro.
Por ello es capaz, alguno que otro de quienes militan en esas ideas, a
cualquier tropelía académica y, de manera descarada, anular a algún aspirante a
la docencia universitaria, por ejemplo, por ser comunista o marxista o algo que
se le parezca. En definitiva, es capaz de pisotear ese espíritu fundamental de
la universidad, el de la libertad de pensamiento, como realización plena para
alcanzar la verdad y elevar el espíritu a estadios superiores.
El socialismo es otra cosa. Socialismo es desarrollo de las fuerzas
productivas. Socialismo es desarrollo económico diversificado, respetando
aquello de jerarquizar industria pesada sin descuidar la liviana y ligera.
Socialismo es diversificación del aparato productivo. Socialismo es soberanía
agroalimentaria. Socialismo es contar con una base material tan sólida que
podamos decir que somos soberanos porque no dependemos de ninguna potencia
imperialista. Socialismo es más humanidad. Lo que vivimos es lo más abyecto del
capitalismo, solo que de palabra, se ha logrado disfrazar de socialismo.
28 AGOSTO 2018
DOCTOR EN ECONOMÍA. PROFESOR
ASOCIADO DE LA FACES EN LA UNIVERSIDAD CENTRAL DE VENEZUELA, INVESTIGADOR Y
DIRIGENTE POLÍTICO.