El desarrollo de los acontecimientos del “tsunami libertad” en Egipto, constituye una enseñanza para los pueblos sometidos por la bota de la tiranía, en cuanto a que toda orquesta necesita su Director. Egipto nos muestra por qué y para qué son necesarios los líderes. Egipto nos muestra que los tiranos, en ausencia de líderes, imponen su voluntad a plenitud pues saben que no hay director que coordine la actuación de los músicos, por mucho talento y entusiasmo que exista, a objeto de coordinar, estructurar y dirigir esfuerzos múltiples y poder convertirlos en una bella y armoniosa melodía. Así de simple es la cosa.
La ausencia del líder necesario es la causa de la demora en Egipto. La valentía, entusiasmo y espíritu de la “furia popular” mostrada por los egipcios busca claramente un cauce, un desenlace. Lo cual esta a punto de ocurrir. Y por qué? Porque en Egipto aparecerá, muy pronto, el que tiene la batuta para dirigir esa inmensa multitud de “músicos” (léase pueblo), hoy en desbandada, buscando un cauce natural que canalice la valiente jornada cívica de romper cadenas opresoras de libertad. Egipto tundrá un nuevo líder, no me cabe duda.
Ahora bien, esta verdad del liderazgo necesario que muestran los acontecimientos del desarrollo politico en Egipto, es negada, muy interesadamente, por las fuerzas que se oponen a la bota militar del tirano de Sabaneta de Barinas. Por qué? Pues porque el tirano, gran ignorante y desequilibrado mental, pero con excepcionales cualidades histriónicas y buen verbo para llegar a las masas, es considerado, erróneamente, como líder popular. En consecuencia la palabra líder es una muy fea palabra, prohibida en esa famosa mesa que llaman “unitaria”.
Por esa razón es que ha desaparecido la figura del líder político dirgiendose a las masas de seguidores, siendo sustituído por “unitarios mediáticos” en una mesa frente a micrófonos rodeados de personas de su entorno para simular lo que no es real, liderazgo colectivo. Y vaya que si no es real! Pues bajo ese grado de “colectividad unitaria” es que ahora se cocinan las opciones de comer dulcitos de poder, promocionada mediática y engañosamente como “lucha unitaria” frente al dictador. Pobre Venezuela, nadie te quiere sufrida madre. Solo pelean las cuatro lochas que te quedan!.
El gran error tanto de Hugo Chavez como de los comensales de la “mesa unitaria” es pensar que asi estarán por siempre, mintiendo, manipulando y engañando tanto al sufrido pueblo humilde con la manipulación líder-pueblo como al confundido y frustrado pueblo pegado a las pantallas de tv para escuchar manipulados mensajes de “comensales de mesa”. Pues bien, Egipto es el mejor espejo para mostrar su destino a quienes pretenden engañar al resto. Egipto es el mejor ejemplo para demostrar su error a quienes pretenden engañar a todos, todo el tiempo.
Los líderes son necesarios desde la fuente primaria misma de toda sociedad, la familia, pasando por cualquier organización estructurada para determinado fin hasta llegar a la estructura organizacional del Estado. Entendiendo que un líder es el que visualiza, traza un rumbo y trabaja consensuadamente en equipo con el grupo que le acompaña, para llegar a “decisions unitarias”. Jamás un líder tiene características de permanencia eterna en sus funciones, decisiones unipersonales, abuso con sus pares o subordinados y mucho menos, irrespetar principios, normas, políticas y procedimientos establecidos para la sana convivencia y la aceptación generalizada de los receptores o audiencia de la organización de que se trate.
Además, el líder sabe que su misión es de carácter “temporal” pues debe producir un resultado, en un determinado plazo, sobre una tarea encomendada. De allí que pudieramos juzgar si la dirigencia actual cumple con le principio de temporalidad que acompaña a un verdadero líder. Tan simple como
Si observamos tanto a quienes liderizan la “barbarie roja” del socialismo de siglo 21 como los “comensales” que encabezan la mesa unitaria, veremos que los une una causa común: la misma dirigencia ( de manera permanente y sostenida), sin plazo ni término y mucho menos hablar de resultados, pues nada de esto cuenta en la Venezuela del desmadre rojo. No es necesario mencionar sus nombres. Todos sabemos quienes son los “líderes” que gobiernan la barbarie roja y quienes son los “comensales” que encabezan la mesa unitaria.
En descargo de los rojos vale decir que apenas tienen 12 años en el oficio. Pero en la mesa unitaria la cosa es mas grave. Pues encontramos dirigentes con mas de 30,20 y 15 años como comensales en esa mesa de la torta pública. Hoy con mas hambre de seguir tragando “guiso publico”pues es su especialidad. No saben hacer otra cosa sino parasitar del Tesoro Público como bien aprendieron, rauda y velozmente, los muy populares rojos del socialismo del siglo 21.
Volviendo al tema central de liderazgo auténtico y visionario, los acontecimientos de Egipto son una buena muestra de lo que falta en Venezuela: la ausencia del líder visionario, capaz y con carisma para convocar masas hacia un rumbo cierto, posible y sostenible a objeto de alcanzar la modernización, organización, paz, bienestar y progreso que ansiosamente buscabamos por allá en 1998 y que un traidor estafador secuestró, bajo engaño, con la ayuda de cómplices externos e internos.
La realidad situacional de la Venezuela del desmadre es tan grave y peligrosa que aterra solo imaginar un escenario similar al de Egipto, en un país donde se ha sembrado la institucionalidad, estructuras de poder, empresas del estado y muchísimos rincones de la geografía nacional con “minas de violencia”, traducidas en organizaciones armadas, creadas con el fin de defender la sostenibilidad y permenencia en el poder de la “barbarie roja” autodenominada socialismo del siglo 21. Quiénes son los que dicen que no hace falta el líder necesario y que se trata solo de un “liderazgo colectivo” en la “mesa unitaria”? No me j…! Preguntenle a los egipcios cómo se come esa vaina!. Bendita sea la Divina Providencia!
01 de febrero del 2011
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