miércoles, 11 de mayo de 2011

JESÚS URDANETA HERNÁNDEZ - MISIÓN FRAUDE

UTILITARISMO, MANIPULACIÓN Y MEDIO



Si me preguntaran cuáles son los elementos fundamentales en los que se basa la relación existente entre el Gobierno y el pueblo venezolano, me atrevería a destacar principalmente tres: el utilitarismo, la manipulación junto al engaño y el miedo.

EL UTILITARISMO COMO DEPENDENCIA
ECONÓMICA

Por utilitarismo me refiero a esa dependencia económica que ha creado el Estado frente a sus habitantes, ya sea por el incremento del número de personas cuyo empleo depende directa o indirectamente de él, o a través de mecanismos que les permiten la obtención de alguna ventaja económica momentánea o esporádica como por ejemplo, las famosas entregas de lavadoras o de dinero en efectivo para que la gente acuda a votar, asistan a una marcha o incluso formen parte de la milicia.

Es decir, el Gobierno compra con dinero contante y sonante la voluntad de muchos ciudadanos. Dinero que por supuesto, no debía estar destinado a esos fines, sino a lograr el verdadero desarrollo y progreso del País y que además no le pertenece al Gobierno sino a todos los venezolanos y que también es utilizado para realizar fastuosas y vergonzosas campañas publicitarias al mejor estilo  de  Joseph Goebbels, jefe de la propaganda nazi, quien demostró que si una mentira se repite suficientemente acaba por convertirse (en la mente de quien recibe el mensaje) en verdad.

LA MANIPULACIÓN NO TIENE LÍMITES

Y he aquí el segundo elemento al que hemos hecho referencia. El caradurismo, la falta de escrúpulos y la facilidad para manipular y falsear la verdad, por parte de las autoridades de este Gobierno, no tiene límites y con gran habilidad y malicia ha logrado alterar la realidad para conseguir sus objetivos. Así, hablan del pasado como si ellos no fueran pasado. Doce años en el poder hacen que ellos sean el pasado hoy. Ningún gobierno, salvo el de Gómez, ha detentado por tanto tiempo el poder, de manera que ya es hora de que asuman sus responsabilidades ante la realidad que hoy nos agobia.

Sin embargo, evaden esas responsabilidades y vuelven una y otra vez a engañar a la población y a prometerle hechos que jamás cumplirán, tal como ha venido ocurriendo todos estos años. Quién no recuerda los gallineros verticales, la ruta de la empanada, la eliminación de los niños de la calle, la dignificación de las cárceles, los cultivos oligopónicos y pare usted de contar.


EL MIEDO ES EL ARMA MÁS PODEROSA
UTILIZADA POR EL GOBIERNO

Y es así, como llegamos a nuestro tercer elemento: el miedo.  No cabe duda que éste constituye el arma más poderosa utilizada por el Gobierno. Hanna Arendt, famosa filósofa contemporánea, quien se dedicó a estudiar los regímenes totalitaristas, sin distinguir que éstos fueran de izquierda o de derecha,  afirma que el factor miedo es utilizado por ese tipo de Estado para controlarlo todo (de allí el vocablo totalitario), lo cual obtiene a través no sólo de una presencia constante, aplastante y asfixiante en la cotidianidad, sino fomentando una ruptura de los vínculos que unen a los ciudadanos e incluso a las familias entre sí.


UN ESTADO QUE PERMANENTEMENTE NOS VIGILA
Y CONTROLA

Un Estado que nos hace sentir permanentemente vigilados y controlados, que constantemente se mete en nuestras vidas, aun en asuntos que son de nuestra exclusiva privacidad, que genera el recelo entre nosotros, lo que persigue es amedrentarnos y lastimosamente consigue ese efecto en muchos. Las constantes cadenas por radio y televisión, los cambios en la Bandera, en el Escudo, en el Bolívar e incluso en el horario, las compras de armamento militar, lo que trata es de demostrarnos que lo controla y que lo puede todo, para así imponer su aparataje sobre nuestro cuello.

UNA FARSA LLAMADA ‘MISIÓN VIVIENDA’

Un perfecto y reciente ejemplo que reúne los tres elementos a los cuales hemos hecho referencia, lo encontramos en esta farsa que se denomina “Misión Vivienda”.  De acuerdo a las propias estadísticas del Gobierno, 14 millones de venezolanos viven en ranchos y el 74% de la población requiere de vivienda. Hace apenas unos meses ofreció la construcción de 2 millones de viviendas a razón de 150.000 al año. Lo cierto es que en los últimos 12 años ha construido sólo 25.000 viviendas por año, la menor cantidad de viviendas desde Pérez Jiménez para acá.

DEMAGOGIA Y POPULISMO PURO

Resulta increíble la oferta engañosa del Gobierno y más increíble que alguien se la crea. No hay duda que ese ofrecimiento le resulta imposible de cumplir y que lo hace sólo por propaganda electoral. Está igual que el bodeguero que colocaba un cartel diciendo “Hoy no se fía, mañana sí”. Demagogia y populismo puro. ¿Quién les va a creer que son capaces de pasar de 25.000 a 150.000 casas por año? Además, si fuera cierto, ya para esta fecha, debieran estar listas cerca de 62.500 nuevas viviendas, que por supuesto no se han construido.

Así, ante la inevitable cercanía del 2012 y ante el hecho incuestionable  de la caída sistemática en popularidad que viene presentando, el Gobierno  pretende apelar nuevamente a esa fórmula maquiavélica aquí planteada. Ofrece bienes materiales, la oferta es absolutamente engañosa y le agrega el elemento del miedo a través de la obligatoriedad de registrar las huellas dactilares en quienes aspiren a tener una vivienda.

NO DEBEMOS CAER EN LA TRAMPA

Aun cuando la idea del registro no es novedosa, toda vez que es la tercera o cuarta vez que se realiza, sin que se hayan obtenido ningún tipo de resultados, en esta oportunidad y en una acción de bajeza sin precedentes, se agrega en la solicitud una máquina capta huellas para así atemorizar a la población, y hacerle creer que pueden controlar su voto. No debemos caer en la trampa.

NO TENGAMOS MIEDO
¡ALCEMOS NEUSTRA VOZ!

El voto es secreto y con el uso de la máquina, lo único que podrá saberse es si la persona fue a votar o no, pero jamás el contenido de ese voto. No podemos permitir que sigan engañándonos. No podemos permitir que nos sigan manipulando, pero por sobre todas las cosas no debemos temer. Como dijo Juan Pablo II “no tengan miedo”. Vienen tiempos mejores, pero para conseguirlos debemos cumplir con nuestras responsabilidades. No tengamos miedo. No bajemos la mirada, alcemos nuestra voz! El cambio es necesario y se acerca cada vez más.

            Jesús Urdaneta Hernández
C.I.  4.391.814
Twitter @jesusurdanetah

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