martes, 20 de mayo de 2014
RAFAEL IRIBARREN - VARIOS DIÁLOGOS
VARIOS DIÁLOGOS
EL
DIÁLOGO POLÍTICO NO VA
No hay un diálogo, sino varios; la mayoría
de los cuales en algún grado y de alguna forma avanzan. Los económicos con
empresarios, sobre la salud, sobre la educación; avanzan; con los sindicatos,
sobre la inseguridad; avanzan En el político no se avanza. El político, del
gobierno, específicamente del sector madurista del gobierno, con la MUD; como
los otros, también está motivado por la consciencia nacional, que
también la hay en los chavismos; de que de no haber rectificaciones importantes
de políticas, de no haber algún destrabamiento, vamos, todos, al colapso o a
una confrontación general.
.-* AL DIÁLOGO BAJO
PRESIÓN
Inicialmente al diálogo va Maduro; es
quién lo convoca; para mejorar su posición dentro de los chavismos; buscando
sobrevivir y lograr alguna gobernabilidad, política, dentro de la crisis total
que se vive; cuya estructura actual, impide cualquier salida
político-institucional convencional. Luego bajo la presión de la calle y
derivada de ésta, bajo la presión internacional Él es el primer y gran
interesado; y, políticamente, de llegarse a algún resultado concreto sería el
beneficiario por excelencia.
Lo que, dentro de lo chato e incoherente
de su discurso y actuación, se trasluce en actitudes y estilos
personales diferenciados, menos agresivos y más abiertos en relación a los de
otros voceros chavistas. Por su parte, para la MUD, el diálogo, si no es
garantía de sobrevivencia, ni de relanzamiento; sí es una posibilidad de
oxigenarse; cuestionada como está y reducidos como han sido a casi nada su
protagonismo y rol; en esencia e operativamente, solo electorales.
.-* EL MADURISMO ES
QUIÉN TIENE EN QUÉ CEDER
Ambos, madurismo y MUD son muy débiles;
sin poder real, carecen de base propia, de capacidad concreta, para comprometer
y garantizar en casi nada, las posiciones y actuaciones de los sectores a
nombre de los que actúan; y a los que en tal caso representan, en
tal caso, solo parcialmente. Con el agravante de que, si por su parte, la MUD
no tiene cómo ni en qué ceder, en términos aceptables políticamente; no tiene
sino muy estrecho margen de negociación. Es, al madurismo, que lo
propició y para quién sí es de vida o muerte; a quién toca, o tocaría, hacer
los aportes concretos para que el diálogo político se mantenga y resulte en
algo.
.-* NADIE APUESTA AL
ÉXITO DE MADURO
Coyunturalmente, el diálogo se tranca
porque el madurismo, aunque tuvo éxito en neutralizar el golpe que la derecha
endógena chavista echó a andar contra él en febrero; aunque entonces frenó
“la contraofensiva antifascista fulminante” de Ameilach y Cabello; que
realmente era contra él. Bien porque luego no tuvo y/o no tiene suficiente con
qué haber ido o ir más allá de haberlo parado; bien porque
no se dispuso; luego, no remató. Por lo que esa “derecha endógena”, atrincherada
en la AN, el PSUV y las gobernaciones; sigue articulada y
activa; con poder; y sigue confrontándolo y saboteándolo internamente. Ello,
sobre que Maduro no tiene ningún liderazgo real dentro de los chavismos; sobre
que nadie lo reconoce como jefe del chavismo ni continuador real de Chávez
capaz de “preservar su legado”; lleva a que nadie, salvo su equipo de acción
fáctica, apuesta nada porque su gestión resulte ni siquiera mínimamente. Menos
políticamente.
.-* LA RENOVACIÓN DE
LOS PODERES, LA PIEDRA DE TRANCA
De tal forma que el diálogo político entre
la MUD y el madurismo; que depende ciento por ciento de éste; en las
condiciones y la estructura de la crisis política actual, es,
práctica, por no decir totalmente, imposible, que se concrete y dé resultados.
Puntualizadamente; uno, porque Maduro, que no controla sino una parte del poder
fáctico, no está en condiciones de comprometerse y avanzar hacia concreciones
importantes que involucren a los chavismos en general; y, dos, porque la piedra
de tranca, lo nuclear para ese diálogo; la renovación de los poderes,
particularmente del TSJ y del CNE; es un tema en que, como se ha evidenciado,
los chavismos en general, no solo el madurismo, sino ninguno, puede hacer ni
una mínima concesión.
Todos saben que su permanencia en el
poder, y su legitimación formal; incluso su sobrevivencia; cien por cien, ahora
sin Chávez; depende de mantener un absoluto y cerrado control del Poder
Electoral; sin ningún tipo de contraloría. De que la AN, el CNE-
SAIME-SMARTMÁTIC y el TSJ; sigan constituyendo su ministerio electoral;
la base de su legitimación constitucional bajo el manejo y control,
cerrados, absolutos, que fueron implantando desde el 2003. Y que en
este momento le es absolutamente vital.
.-* SALVO EL “PLAN
REPÚBLICA”
Quizás haya que llegar a la conclusión de
que, precisamente, lo único importante, o casi, que hoy sigue habiendo en común
entre los chavismos, hoy cada uno con su propia agenda; y que condiciona
terminantemente el diálogo político, su imposibilidad; es ese control, que,
compartido, todavía mantienen de los componentes político-institucionales de
poder electoral; que, hoy más que nunca le son vitales. A todos.
Componentes de los que, indicativamente por los vientos que soplan, el único
del que todo el mundo, chavista y no chavista, maneja un “pronóstico
reservado”; es el “Plan República”. Siendo probable que las próximas elecciones
locales de San Cristóbal y San Diego sean manipuladas experimentalmente para
tener una medida de cual sería su actuación concreta.
.-*NI EL MADURISMO NI
LOS OTROS CHAVISMOS REACTIVARÁN EL DIÁLOGO; SOLO JUEGAN A GANAR TIEMPO
Aparte la discusión general sobre el
diálogo político entre el madurismo y la MUD; de la controversia sobre su
pertinencia, validez y alcance posible, que se dio al constituirlo; y que
recién se reactivó al suspensión y de su eventual improbable reactivación.
Obviamente, en el marco de la crisis nacional, un diálogo político que no
apunte a resultados concretos; a ninguno, ni siquiera en perspectiva; y además,
abiertamente declarado; no tiene ningún sentido; salvo el de facilitar su
manipulación retórica por parte de Maduro. Y, concreta y principalmente ante la
presión internacional; específicamente ante UNASUR.
En ese sentido, aparte el cuestionamiento
general y concreto de que son objeto y merecen la MUD y la oposición en
general; es de mínima coherencia que sus representantes hayan suspendido su
participación en las mesas de diálogo político. Y que hayan recurrido a ese
ente subregional y El Vaticano; como ha sido. Sin embargo, aunque atienden a
los cancilleres y el Nuncio; es evidente que ni el madurismo ni los demás
chavismos van seriamente a reactivarse en el diálogo político; ni ahora ni más
luego. Su juego es ganar tiempo; alargando las fases inevitablemente previas a
su hipotética reactivación; mientras impulsan el avance de los diálogos en
otras áreas o dimensiones.
.-* HACÉRSELO
POLÍTICAMENTE MÁS COSTOSO A MADURO
A la vez que Maduro declara que él no se
sale del diálogo; repite que no va a negociar nada ni a hacer concesiones; que
le “piden cosas que no pueden ser”. Y sobre la marcha convoca a gobernadores y
alcaldes a dialogar en Miraflores sobre la inseguridad y la reactivación del
Plan Patria Segura. Luego de lo que, declara que el diálogo sigue. Por su parte
en la misma línea panfletaria de Cabello, de Aristóbulo y demás, de Tania Díaz,
etcétera; de la Eekhout; claramente refiriéndose al diálogo político, Jaua,
admonitorio, afirma que “quien se para de la mesa es que quiere guerra”; y
Bernal, advierte que no se dejarán “chantajear”, que “la revolución no se
negocia”; mientras por todo el país se leen pintas de “ni negociación ni conciliación,
comuna ya”. Uno tiende a llegar a la conclusión de que en los chavismos, nadie
está dispuesto al diálogo. Ni siquiera, aparentemente Maduro a pesar
de que es para quién es de vida o muerte.
El anuncio de Aveledo sobre una inminente
medida humanitaria para Simonovis, obviamente tiene que haber salido del
intercambio con los representantes de Maduro en el diálogo. A pesar de lo que,
inmediatamente fue desmentido por Jorge Rodríguez; obviamente, por bandas,
desmintiendo y descalificando a Maduro. Siendo una acción humanitaria ya sin
casi costo político; que al contrario le significaría una importante valoración
política de su posición. Y, que hasta tácticamente, pudiera esgrimirse
compensatoriamente en las, negociaciones, o conversaciones, sobre lo
medular duro altamente costoso para los chavismos que es la renovación de los
poderes.
No se explica con que no hay
disposición al diálogo político; que demostradamente si la hay cuando se avalan
y asumen los demás diálogos que también tienen una dimensión
política. Mayoritariamente en el país, y en las bases chavistas, apoyan el
diálogo; y seguramente la medida a Simonovis; salvo posiciones radicales,
auténticas las menos, y, oportunistas las mas. Sucede es que ningún chavismo,
ni siquiera el madurismo, está dispuesto a aparecer y que se le señale, como
conciliador, “negociando el legado de Chávez”. Ninguno está dispuesto, no a
ceder; sino a aparecer cediendo. Todos juegan a la intransigencia, al
radicalismo vacíos; siempre en el marco de la sorda lucha interna entre
chavismos por el Poder Y, dentro de tal juego y lucha interna, además, casi
todos, a bloquear, o a hacerle muy costoso cualquier logro político de Maduro.
.-* EN CONCLUSIÓN, EL
DIÁLOGO POLÍTICO NO SIGUE; Y APROBARÁN LA LEY ORGÁNICA DEL TERRITORIO
La conclusión es que el diálogo político
como mínimamente tendría que ser, en la perspectiva de algún resultado
concreto; sobre todo y concretamente en relación a la renovación de los
poderes; pues, no va; no es posible. A menos que se produjera una importante
ruptura entre los chavismos principales; hoy cada uno con su propia agenda;
pero sobreviviendo mientras comparten el Poder. O, que la MUD, negocie de tal
forma que sobre las concesiones formales, no de poder fáctico, que
los chavismos se dispongan a hacer y hagan; les permita mantener el control
total y manejo discrecional actual sobre el sistema electoral.
La coincidencia, prácticamente la única
importante hoy existente entre los chavismos, de no hacer ninguna concesión en
relación al control total de los componentes del poder electoral; en la ocasión
de la renovación de poderes; se estaría proyectando hacia la otra
coincidencia, igualmente general, ya referida; la de ganar tiempo. Ganar tiempo
para establecer, con el control que todavía tienen de la AN, las bases
jurídicas, técnico-jurídicas; y operativas; que les permitan
asimilar y compensar los efectos en los procesos electorales próximos, de las
concesiones que eventualmente se vean obligados a hacer en el sistema.
En esa dirección se explica la presión,
luego de varios años aprobada en primera discusión; con que en la AN
se lleva adelante, la segunda discusión de la Ley Orgánica del Territorio. A
partir de cuya promulgación se establecería, obligante siendo Ley Orgánica, un
nueva territorialización político-administrativa del país; que, obligantemente,
serviría de marco constitucional al CNE-SMARTMATIC, para el rediseño de las
circunscripciones electorales que implantó para las elecciones parlamentarias
del 2010. De forma de lograr la misma actual o aún mayor mayoría que hoy tiene
en la AN; en el 2015 incluso con menos votos que entonces.
Rafael Iribarren
Caracas mayo del 2014.
Etiquetas:
Rafael Iribarren Diálogo,
Venezuela 2014
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario