domingo, 5 de julio de 2015
EL NOBEL DE ECONOMÍA PARA FRANCISCO
EL
NOBEL DE ECONOMÍA PARA FRANCISCO
Miguel
Aponte
Justo cuando es
obligante, a pesar de las dificultades, demostrar que las cosmovisiones
contemporáneas no entienden el laberinto de nuestra actualidad y sólo sirven
para justificar sus fracasos, aparece la «CARTA ENCÍCLICA LAUDATO
SI’, SOBRE EL CUIDADO DE LA CASA COMÚN», que
el papa FRANCISCO publicara el pasado 24 de mayo de 2015.
Nosotros, que hemos pasado por comunistas frente a los liberales y por esclavos
del capital frente a los marxistas, vemos ahora al
propio Papa enseñando a todos cómo se piensa cuando se piensa, sin
miedo ni chantaje, asumiendo las consecuencias; y, la verdad, no incomoda para
nada esta «modesta» ayuda.
Liberalismo y
marxismo, derecha e izquierda, no son hoy verdaderas alternativas, opuestos
reales y útiles a la hora de contrastar y comprender; representan el
maniqueísmo contemporáneo: son «parte interesada» del mismo discurso con signo
contrario, cinismo con el cual se quiere seguir ocultando la realidad actual y
sus salidas. Veamos.
¿Cuál es la diferencia
entre defender la propiedad para justificar el aumento de la pobreza y la desigualdad;
y aumentar la pobreza y la desigualdad negando la propiedad? ¿En qué se oponen
en verdad liberalismo y marxismo si lo único que reivindican es la propiedad
privada de algunos versus la propiedad privada de un déspota y sus cortesanos,
es decir, algunos, donde además aquellos se cuelan? ¿En qué es que son
contrarios? Están, al contrario, ambos, atrapados en su propia visión de
la «dominación perfecta»: ¿quién es mejor amo, «el
capital» o «la burocracia»? ¿No son ambos la expresión de la sociedad
dividida para siempre
entre «dirigentes» y «ejecutantes»? ¿Dónde
dejaron la democracia?
¿Dónde dejó el interés
común una sociedad en la que sólo importa la economía, individual o colectiva,
qué más da? ¿La libertad va a ser sólo la exaltación del ego, incapaz de pensar
en el mañana, ni siquiera porque allí vivirán nuestros hijos y nietos? ¿La
igualdad va a ser nada más que la vulgar eliminación del individuo y todas sus
libertades? ¿Por qué iba a ser mejor que alguien dirija la sociedad para
siempre en lugar de la difícil democracia, la política y el desafío de pensar?
¿El abandono de la política por los ciudadanos no nos llevará siempre al
autoritarismo, de derecha o de izquierda, qué más da? ¿Nos debemos conformar?
Este es el tipo de preguntas y la reflexión que nos invita a hacer este aporte
denso y valiente del Papa. Por eso, aunque sería poco, proponemos
formalmente el Premio Nobel de Economía para el papa FRANCISCO;
una decisión que en realidad beneficiaría al premio que al fin daría muestras
de entender qué representa la economía en una sociedad que busca el verdadero
sentido de sí misma y no solo algoritmos y dogmas mecánicos alejados de toda
realidad.
CARTA ENCÍCLICA LAUDATO SI’ DEL SANTO
PADRE FRANCISCO: SOBRE EL CUIDADO DE LA CASA COMÚN:
05 DE JULIO DEL 2015
Etiquetas:
Miguel Aponte,
Papa Francisco - Carta Encíclica
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