HISTORIA HOY
LA ETAPA CÁNCER-RETORNO
Agustín Blanco Muñoz
La noticia del retorno del Golpista-presidente(GP) no es sorpresa. En artículo anterior: del 01-07-11, (http://historiactual.blogspot.com/2011/06/papa-fidel-como-tu-no-hay-dos.html) planteamos el escenario de la despedida que haría de su padre-médico y enfermero Fidel Castro.
El retorno era lógico si tenemos en cuenta que estamos ante quien se considera un héroe-caudillo-libertador y estricto continuador de la obra de Simón Bolívar.
Para el GP era indispensable estar al frente de la conmemoración de los 200 años de una gran mentira que los diferentes actores, a lo largo del tiempo, han querido convertir en una gran verdad.
La idea consiste está dirigida a hacer creer que la llamada independencia fue una gesta popular y no una decisión y obra de la oligarquía que utiliza para sus fines a blancos de orilla, pardos, negros y población originaria.
Por esto queda claro que sólo un estado de salud muy deteriorado podría explicar que el GP no presidiera este festejo de la ‘grandeza heroica’.
Por eso su regreso este 04/07/11, evidencia que su malestar, sea o no un cáncer, no se toma como una limitante para alcanzar los objetivos planteados. Es algo que más bien incita a una batalla contra el mal que será vencido por el héroe.
Sin embargo, por encima de lo que se puede colegir en este campo, prosigue una visible y creciente desinformación propia de las situaciones en las que se le otorga espacio y procedencia a la manipulación.
Hasta este momento no se ha clarificado el proceso de la enfermedad. El GP es operado supuestamente de emergencia en La Habana el viernes 10/06/11.
El domingo 12 en la noche en entrevista por Telesur señala que fue sometido a una ‘operación profunda’ de un absceso pélvico no infeccioso y que los resultados de la biopsia eran negativos.
El día anterior había estado muy adolorido pero ya para el momento estaba en franca recuperación.
Las especulaciones se hicieron frecuentes. Frente a los señalamientos de los “escuálido-imperialistas” surgen los del lado revolucionario para negar enfáticamente la presencia del mal. En esto destacan el Min. Información y el Presidente de la Asamblea Nacional.
Pero en su mensaje del 30/06/11 desde La Habana, el GP dice que había sido operado por segunda vez y que se le había extirpado un tumor cancerígeno, que estaba en fase de recuperación y seguro de vencer la adversidad.
En su discurso de 04/07, no leído como el del 30/06, el GP señala que la segunda operación se realizó el 20/06 cuando los estudios médico-científicos diagnosticaron la existencia de un cáncer. Fue una operación difícil, profunda que tuvo una duración de seis horas.
Del quirófano salió para Terapia Intensiva. Y en el lugar permaneció hasta el 24/06, fecha en la cual hace suya la fuerza del Negro Primero y se levantó.
Este planteamiento no parece acorde con los lineamientos médico-científicos que se invocan. El propio paciente le dice a sus seguidores desde ‘El Balcón del Pueblo’ que ellos no se imaginan como estaba él diez días antes. Que todo parecía obra de un milagro.
No se sabe entonces, en definitiva, si actuó la ciencia, el milagro o ambos, pero el caudillo, héroe y jefe único regresó a seguir su tratamiento al pie de la letra para ganar esta otra batalla.
Y por ello ‘venceremos y viviremos’. De allí que para aumentar sus fuerzas lanzó su ‘¡Qué viva Chávez!’ al lado del ¡Qué viva Bolívar! o del ¡Qué viva Fidel!
En general su discurso repite el contenido del anterior y los agregados, lejos de aclarar confunden más. Eso de que su retorno es obra del milagro lleva a pensar, por ejemplo, en un trabajo conjunto de José Gregorio Hernández y los babalaos cubanos.
¿Y qué hay en el fondo de todo esto? La enfermedad, cualquiera que sea, sirve de pretexto para una específica movilización que permita alcanzar algunos objetivos.
A esta hora nadie puede negar la confederación de grupos que hacen pugna en el PSUV. Con este cuadro es materialmente imposible profundizar una revolución, limitada a crear una grosera boliburguesía.
De modo que el retorno hay que ponerlo a tono con la prédica permanente de los altavoces Jaua y Maduro: estamos más unidos y disciplinados que nunca. Si eso fuera verdad y, en consecuencia por todos conocido, a nadie se le ocurriría repetirlo hasta la saciedad.
El retorno, con su tono y gran toque de aclamación, tiene como objetivo rescatar a plenitud la condición de líder único e indiscutible, para dar inicio a una confrontación que libre al proceso de figuras que ya cumplieron su cometido y pueden ser perfectamente desechadas.
Es como volver al poder constituyente, a la fuerza-poder y empuje del pueblo que, sumado al de las fuerzas armadas populares, constituirían las milicias para la batalla final de y por la revolución.
Esto es indispensable para asegurar la permanencia-perdurabilidad de la revolución. A este respecto dice el GP este 05/07/11 que hoy no sólo está planteado el retorno de él sino también el de la patria, de la revolución socialista. Se alcanzará así el retorno eterno.
En suma, el regreso hace de la enfermedad un pretexto para lograr objetivos políticos que mucha gente no se esperaba. El Jefe Único mantiene y proyecta sus poderes. La revolución será lo que él decida, porque al igual que Bolívar, él es pueblo.
El cáncer hoy se convierte en palanca del ‘cambio revolucionario’. Como dijimos el 03 de julio, en El problema no es el cáncer (http://historiactual.blogspot.com/2011/07/historia-hoy-el-problema-no-es-el.html): esta llamada revolución se dimensiona hoy jugando al cáncer revolucionario para ponerlo a actuar como depurador que quita del camino ambiciones distintas a las que corresponden a los lineamientos heroicos establecidos por los altos intereses que hoy nos rigen.
La manipulación, con mira a aumentar el culto a la personalidad, el autoritarismo y el control de todas las instituciones en ningún otro momento de estos 200 años de supuesta independencia, alcanzó tanto espacio y proyección. Y es este un piso adecuado para el desarrollo de un tiempo clave en esta revolución: la etapa cáncer-retorno.
Y en esta nueva etapa de la revolución, el GP, enfermo de heroismo, echará el resto por dejar un legado que vaya más allá de lo logrado: el rescate de la independencia.
Mientras, las oposiciones se limitarán a lo que saben hacer: contribuir con el oficialismo a forjar su estabilidad y gobernabilidad. Y esto lo consideran fundamental para que siga planteado el camino electoral que algún día servirá para crear un nuevo orden que deje atrás el atraso socialista del siglo XXI
¡Qué historia, amigos! Twitter: @ablancomunoz
05 de julio del 2011
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