El grito del disparo siempre procura acallar
los decibeles de una idea que apunta
Ayer, lunes 05 de diciembre del 2011, la habitual sesión de la Cátedra ‘Pío Tamayo’ fue saboteada por la acción de la violencia. En esta ocasión, se daba continuación al ciclo Elecciones y Candidatos ¿Para Qué? Le correspondía el turno al Dr. Diego Arria, en su condición de precandidato de la MUD.
Una vez realizada la exposición central, habló el primer comentarista, el profesor Alfredo Weil e intervenía el segundo , El profesor Victor Poleo, cuando un reducido grupo que se transportaba en motos, lanzó al interior de la Nueva Sala E una bomba, que produjo los efectos conocidos
Una vez desalojada la Sala y ante la natural impotencia, decidimos trasladarnos a los espacios del Doctorado en Ciencias Sociales para continuar la actividad en una de sus aulas. Pero cuando el grupo se desplazaba por la plaza cubierta del Rectorado se produjo una nueva agresión.
Esta vez dos personajes atentaron contra el Dr. Arria. Uno de ellos lo golpeó por la espalda en dos oportunidades con un tubo cilíndrico recubierto de cartón. También sufrieron daños un acompañante del precandidato y el Dr. Luis Marín.
A pesar de este segundo ataque intentamos seguir hacia el lugar escogido para seguir el foro. Pero ante la amenaza de muerte proferida por los motorizados y la ausencia de toda seguridad, decidimos abandonar el lugar.
En el camino apareció un entrevistador y un camarógrafo de Ávila TV tratando de “entrevistar” al Dr. Arria, quien no accedió y ante la insistencia de quien la hacía de periodista intervino el Dr. Luis Marín para señalar que esa planta televisiva formaba parte del mismo grupo que nos acababa de agredir.
Al momento que el Dr. Arria y sus dos acompañantes abordaban el auto para marcharse se escuchó otra vez la advertencia: Si lo vuelven a traer los matamos a todos.
Pío Tamayo siempre esgrimió la idea
ante el fusil de los arribistas
En medio de la caldeada situación el único vigilante que hacia acto de presencia en el rectorado, nos informó que había pasado la novedad al coordinador de guardia de apellido España, quien le habría respondido que la Dirección de Seguridad no había actuado porque nosotros no habíamos participado sobre la actividad.
Esto es completamente falso. Tenemos copia sellada y firmada por la Ciudadana Arelys Colón, Secretaria de la DISE-UCV, como comprobante de nuestro pedido de vigilancia, en previsión de que pudiera haber alguna alteración durante el desarrollo del evento.
Deploramos una vez más estos hechos que contradicen la razón de ser y el espíritu mismo de una Cátedra cuyo trabajo ininterrumpido, en este recinto, tiene un registro de 28 años. Durante casi tres décadas este espacio le ha dado albergue a las más diferentes y contrapuestas posiciones. Y su rasgo fundamental ha sido, es y será, el respeto por las ideas y el debate en base a pensamiento y creación.
Triste el aula que se llena de humo
en vez de esperanzas
Este lunes se repitió el mismo proceder: interrumpir un debate a fuerza de bombas lacrimógenas. Un instrumento utilizado habitualmente por los aparatos represores de todos los regímenes, para amedrentar, dispersar, intimidar. Muy lejos de las armas del debate, la discusión y la controversia creadora.
Y se aúna a la lacrimógena, el acto cobarde de atacar por la espalda al ponente Diego Arria, quien no estaba armado, ni acompañado de guardaespaldas. La agresión alcanzó a Luis Marín.
El ruido del disparo es la voz
de los que nada tienen que decir
La CPT no suspenderá sus actividades ni dejará de convocar a todas las partes al debate necesario e imprescindible en medio de un expaís polarizado, dividido y fraccionado. Así lo hicimos la vez pasada. Y hoy lo reiteramos. Invitamos de nuevo a los agresores a participar en una sesión para que puedan exponer sus puntos de vista y aportes, el contenido de sus controversias y propuestas.
Como dijimos en esa ocasión: De la sana confrontación, de la pluralidad de puntos de vista, del ejercicio pensamental de escuchar y ser escuchado, de estudiar la realidad a partir de una perspectiva total, y no remitida a nuestros intereses temporales y personales o grupales, es de donde pueden provenir ideas y acciones que contribuyan a sacar este expaís del destrozo en el cual se encuentra y avanzar, con la participación de todos, hacia una historia no gobernada por la violencia ni por una tiranía de y para el pensamiento único.
A esta hora, de inminente peligro para la universidad venezolana y su autonomía, se impone revisar, de manera urgente, la defensa de estas instituciones. No es posible que sigamos divididos entre vigilantes y vigilados. Y menos aún cuando no ha sido posible crear un cuerpo de seguridad verdaderamente profesional y alejado de las influencias politiqueras.
Indispensable, en consecuencia, impulsar un frente activo de defensa de la autonomía universitaria. No se trata de un organismo para el asambleísmo sino de un cuerpo para la defensa a nivel de información y acción de una universidad hoy amenazada como en ningún otro momento de su historia.
La tiranía del pensamiento único avanza hoy con su mayor empeño destructor y no puede ser la universidad venezolana la llamada a abrirle las puertas, sin presentar pelea de ideas y acción, a la ignominia que ya hace planes para convertir estos espacios en centros de una supuesta revolución en los que prevalezca el dominio mayor de la imposición de una forma de pensar, ser y actuar.
Estamos convencidos de que hay o defensa verdadera o entrega cómplice de esta institución a las fuerzas de la educación de la miseria que promueve y alimenta este regimen.
Coordinadores
Agustín Blanco Muñoz / Mery Sananes / Danielita Barrolleta
Tlfs 6052536 / 6052563 (0416) 638-7320 (0414) 333-6515
Twitter: @ablancomunoz @embusterias
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