La emergencia y los pabellones duermen el sueño de los justos…
¨No son los muertos los que en dulce calma la paz disfrutan de su tumba
fría, muertos son los que tienen muerta el alma y viven todavía¨
Antonio
Muñoz Feijoo
Popayán, 1851-1890
Los
ministros son cínicas muecas, andantes siluetas desdibujadas de una realidad
monstruosa y lacerante que han contribuido a forjar; ven doquier la falsedad
que su ignominia proyecta al exterior buscando culpables, siendo que los únicos
falsarios son ellos. La ministra de Salud ignora que el Hospital Vargas de
Caracas, a secas, se ha llamado así desde su fundación en 1893 y que ha sido
tomado como depositario de mentiras. La remodelación tantas veces iniciada y pospuesta
ha llevado seis largos años y la corrupción se ha robado al menos tres
asignaciones del dinero dispuesto; no hay culpables.
La
Sala 3 a la que llamo "mi sala" por haber permanecido allí
activamente por espacio de casi 50 años, la remodelaron porque se cayó parte
del techo como consecuencia de la humedad y la indiferencia. La emergencia y
los pabellones duermen el sueño de los justos. En vez de pensar en nuevos
hospitales que nunca construirán, no se les ocurre pensar en poner a funcionar
los que destruyeron y arrebataron a los más pobres y segregados de la justicia
social.
No hay medicación para enfermedades comunes como la diabetes y las enfermedades
tiroideas. Es resolviendo esos problemas en que debería ocupar su tiempo
revolucionario, no pavoneándose por los pasillos de mi hospital. Quien no
conoce de humanitarismo ni dignidad, no puede humanizar ni dignificar al pobre
paciente hospitalario tantas veces utilizado para torvos fines.
"La vida no es la vida que vivimos, la vida es el honor, es el recuerdo.
Por eso hay muertos que en el mundo viven, y hombres que viven en el mundo
muertos".
1 comentario:
Extraordinario escrito.
Me reconforta que existan hombres como ud.
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