Ayer, 30 de Agosto de 2010, en horas de la noche, partió de este mundo el irreductible Sr. Franklin Brito. Universitario dedicado a las labores del campo y la docencia. Luchador incansable por la Dignidad, la Justicia, la Honestidad y la Decencia. Esposo y padre ejemplar. Un hombre que no se detenía en las palabras sino que predicaba constantemente con el ejemplo de su vida y su obra.
En una de mis visitas al amigo Franklin en el Hospital Militar de Caracas, me dictó las siguientes reflexiones:
• “La Justicia y la Dignidad son los valores más importantes del ser humano. La indiferencia no permite que crezcan hasta ser los pilares fundamentales del Paraíso adonde acudirán los hombres rectos”.
• “Pobre en alma, pobre en dignidad y pobre en capacidad la persona que para llevar a su casa el pan para sus hijos y para conseguir sus objetivos tenga que traicionar su conciencia, traicionar a sus semejantes y adular. Estaría reconociendo su poca capacidad y sería el peor de todos los mendigos; y con todo el dinero del mundo sería el más pobre porque estaría contribuyendo con su propia destrucción y la de sus semejantes. No hay argumento que valga para traicionar su conciencia. La Dignidad es la brújula que te orienta y te ubica en los mejores caminos”.
Era Día de Reyes, y Franklin Brito nos regaló este par de citas moralizantes.
Hoy cesó en sus sufrimientos pero nos dejó su incansable lucha, hasta las últimas consecuencias, por valores fundamentales, como lo son: Justicia, Pulcritud, Libertad, Compromiso, Trabajo, Dedicación y una defensa a ultranza de la Propiedad Privada ante un Estado totalitario, usurpador y abusador que no se para en nada hasta saciar su apetito de destrucción. Continuará en su empeño si no se le atraviesan más Franklin Brito que al unísono lo detengan con un decidido ¡YA BASTA!
En un país donde la Constitución Nacional ha sido derogada de facto y la Ley es la voz del Caporal no hay sino un salvaje retroceso a los albores de la Historia. Una vez más en Venezuela se escenifica la lucha entre Civilización y Barbarie, y ya sabemos quien triunfará al final. Pero ese pronto desenlace dependerá en mucho del coraje y la inteligencia, de la constancia y la paciencia, pero también de la firme decisión de expurgar los males que nos aquejan. Nuestros antepasados no tuvieron miedo, y eran circunstancias mucho más difíciles, ¿lo vamos a tener nosotros?
Franklin Brito nos ha dejado un inmenso legado. Quiera Dios que sea aprovechado por el Pueblo Venezolano.
PAZ A SU ALMA
Bernardo Conde
Caracas, 31 de Agosto de 2010
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