Este gobierno fracasó en su compromiso social con el pueblo y ahora pretende ganar votos e indulgencias con expropiaciones o escapulario ajeno. Qué manguangua! Todos los recursos habidos, producto de la mayor renta petrolera de la historia, y por haber, de la venta de las concesiones a terceros. En diez años de desgobierno el ejecutivo ha destinado el grueso de esos recursos para hacer política local y regional con el ánimo de concentrar más y más poder a su alrededor.
Frenéticamente se alista para la guerra, no sabemos con quién, mediante la compra desproporcionada de armas en una época en que la verdadera batalla es la económica y se libra con más y mejor producción, con ciencia y con tecnología propia.
Cuando los países industrializados del mundo desarrollen de una vez por todas la fuente alternativa de poder para mover sus maquinarias, el petróleo pasara a la historia como pasó con la era de los metales y la del carbón. Esa evolución podría durar algunas decenas de años, pero también puede sorprendernos en cualquier momento y dejarnos con los crespos hechos, ya que la ciencia aumenta a pasos agigantados.
Venezuela un país productor y exportador de crudo por excelencia, no se ha dedicado a sembrar su petróleo, por lo que podríamos convertirnos de la noche a la mañana en una nación de pedigüeños como algunos de esos países amigos del presidente que viven de los donativos provenientes de otras naciones.
Este gobierno irresponsable que reparte a manos llenas lo que es de todos los venezolanos, todavía sigue creyendo en la inmortalidad del cangrejo y en la universalidad del proletariado, menos en el nuestro, a pesar del fracaso revolucionario Ruso, del Chino y, del peor de todos, del Cubano.
Como ya esta a pocos meses de volteársele la tortilla por completo, entonces en su desvarío escoge el camino corto que lleva a la perdición y hecha mano de lo ajeno para endulzar la cicuta de su desventura. En su tránsito expropió y confiscó: Radio Caracas, un centenar de Emisoras Radiales, los Automercados Cada, las adyacencias de la Plaza Bolívar, los Galpones de la Polar, los Centrales Azucareras, varios Hoteles en Margarita, la Hacienda de Rosales, Las Carolinas de Diego Arria, los Molinos Monaca, las Casas de Bolsa, en breve irá por Makro y por los Bancos, etc...
De manera fácil e inmediata el mandamás esta queriendo resolver de un plumazo la demanda de quejas que se le viene encima. Qué manguangua! No sabemos si con esos movimientos de ultima hora esta evitando o generando un colapso social. Porque, esos son sus antecedentes y que se huele o ve venir. De alguna forma hay que detener esa avalancha (no me refiero a los votos) de odio que es avivada desesperadamente desde las altas esferas del poder. “
El gobernante insensato aumenta la opresión; pero el que no es ambicioso tendrá larga vida”:Proverbios 28:16.
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