viernes, 24 de mayo de 2013

RAMÓN SANTAELLA - ¡ALGO TRAMAN! - PALABRAS DE LA CIRCUNSTANCIA 3





 PALABRAS DE LA CIRCUNSTANCIA 3
¡ALGO TRAMAN!


          18/5/2013, la mañana se presenta soleada y los comentarios de los andantes coinciden en que el tiempo anuncia lluvias porque el “Sol pica”, un decir del pueblo, creador de lenguajes, según las circunstancias. No obstante, pasaría el resto de las horas y en ningún momento hubo  condiciones atmosféricas que permitieran advertir presencia del fenómeno en cuestión.

          Una de las andantes de uno de los tríos femeninos que forman pequeños grupos en el área de las caminatas, levanta la voz y exclama ¡Coño, amigas!, díganme si esa picazón producida por el Sol es producto de alguna vaina que mandó a rociar el Presidente, con la finalidad de averiguar quiénes no votamos por él.

          Yo les voy a decir una vaina, así como dicen en el barrio que el difunto padre, un buen día logró comisionar a uno de sus aviadores para que lanzara desde el espacio aéreo caraqueño, unos cuantos sacos de harina de huesos molidos de cadáveres que no fueron reclamados por sus familiares, disque para amansar y someter políticamente a la población y en especial a sus enemigos escuálidos; pudiera pensar como me llamo Rosa, que su hijo en medio del cuadro de angustias generado por no estar seguro si ganó o perdió las elecciones del 14 de abril, se haya puesto de acuerdo con la misma gente aquélla y haber lanzado algo desde el cielo para descubrirnos.

¡Amigas!, y nosotras echándole la culpa al Sol.

          ¡Por Dios, Rosa!, interviene Petra, no vas a creer eso a esta altura de tu existencia y en pleno siglo XXI, cuando Liliana Hernández que fuera asambleísta, la que fue de AD y después se inscribió en Primero Justicia; ¿Cuál, la que parece prima hermana del diputado Ricardo Sánchez?, interrumpe Josefina, la tercera del grupo, quien afirma: “no por traidora a sus ideas, sino porque cuando esta señora empieza hablar no la para nadie ¿Tú te imaginas a esos dos discutiendo o dialogando en relación a cualquier tema? ¡Na guará!

          Por favor, no me interrumpan para ese tipo de comentarios, expone Rosa; eso a mí me tiene sin cuidado, lo que si me interesa, al igual que a cientos de miles de venezolanos, es cuanto ella declaró a la prensa, diciéndole al supuesto Presidente,  estar  equivocado en razón al voto “secreto”; de paso, le recordó que aún él no sabía si era presidente. Es más, si eso fuese el caso, ese señor estaría cometiendo delito.

          Tú ves, esas son las cosas que no puedo oír porque me siento mal, señala Josefina, al instante de preguntar: ¿Me quieren decir, cuál de las tantas veces que  el Gobierno ha violado la constitución, ha sido considerada delito por los otros poderes del Edo., más allá de la opinión de los miembros de la MUD? Ustedes ¿O son nuevas o se lo creen?

¡Caramba!, no parecen cosas suyas, mis amigas, si el voto es secreto, significa que es secreto y punto; pero, ¿Quién?, díganme ¿Quién puede impedir al Gobierno, enterarse de lo que desea, si es dueño casi absoluto de las decisiones políticas tomadas en el país?; por otra parte, no le podemos negar esa manera de patalear al Gobierno, cuando se acercan unas elecciones municipales y el Gobierno pudiera perder de nuevo.

          Ja, Ja, Ja, ponte a creer Chirulí, advierte Rosa, precisamente, la presión que se está ejerciendo sobre los empleados públicos y la política esa que llaman “El Gobierno de calle”, más la subida de la pensión del Seguro Social, hasta Bsf.2.800, así como la actitud “autocrítica” de todos o casi todos los miembros del Gabinete como si ahora, integraran un equipo de ángeles terrenos en  un aparente viraje de 180º.

 ¡Algo traman!, compañeras, algo traman, no me van a venir con esa curva, cuando estamos esperando la recta; a otro perro con ese hueso, mi amor.


          ¡Cónchale, “muchachas”!, es Petra la que advierte: el que no sabe si aún es Presidente como lo indica Liliana Hernández, debe sentirse culpable de algo, porque está procurando ser reconocido por sectores, supuestamente enemigos que anteriormente fueron objeto de ataque de parte del Gobierno y ahora, este muestra o aparenta necesidad de un  acercamiento; ¿Esto no les parece extraño?

          ¡Sí y No!, contesta Josefina, al instante de exclamar: ¡Ay mis amigas!, ¡Quién supiera traducir los vericuetos de los políticos, porque no así, la política me parece en términos generales, la manera o acción lógica de comprender y desarrollar todo lo concerniente a la sociedad, aunque su propósito, es pretender alcanzar el poder y conservarlo, mientras los políticos se las ingenian para hacer de sus deseos e intereses, dicho propósito; algo así como ocurre con la Ciencia y los científicos, donde estos no se ponen de acuerdo en relación al propósito y  objetividad de aquella, para después acusarla de todos los males, desde la ventana de cada concepción filosófica del mundo.     

          ¡Caramba!, mi amor, ¡Caramba!, como dice la composición poética del fallecido Otilio Galindo, Usted nos ha salido filósofa, amiga, cuestión que desconocíamos pero, así es el mundo, siempre lleno de sorpresas y esta es muy agradable porque se trata de nuestra amiga.

Es Rosa, la que intenta responder al discurso de Josefina y pregunta: ¡bien, amiga!,  pero no has dicho ¿por qué no es extraño tal proceder? 

          No tiene nada de extraño, responde Josefina, porque el que te conté sabe mejor que nadie, la verdad de lo ocurrido el 14 de abril y pecaría de mal político; además, de prepotente como lo era “su” padre, si dadas y conocidas las circunstancias, asumiera una actitud ofensiva, atacando a todos los sectores que han respaldado a las oposiciones integradas en la MUD.

          Entonces, pregunta Petra, ¿tú consideras que ese cambio de actitud en Esteban de Jesús, es reconocimiento de culpa?

Si lo estás preguntando, señala Josefina, Yo no sabría responderte, pero tengo la impresión que Tú lo crees así, y agrega: Yo no he querido decir semejante cosa, no la hubiese imaginado, ni me hubiese pasado idea parecida, por mi estrecha frente.

          ¡Sí, Luís!, responde Petra, por algo lo asomaste, para que una opine y tú te haces la mosca muerta, pero está bien, ahora, me respondes “por qué no”; ¿por qué no, qué?, interroga Josefina.

          Rosa interviene: ¡Mira, mija!, no te hagas la pendeja, tú dijiste sí y no cuando se preguntó si la actitud política de acercamiento del juramentado era extraña.

          ¡Está bien!, ¡está bien!, expresa Josefina, es cierto, ¡Miren!, cuando yo creo que no hay nada extraño  en la actitud política del que te conté, es porque él y su gente deben estar convencidos que esa manera de gobernar  disque socialista y revolucionaria, ha fracasado en todo el mundo; deben saber también que mientras no produzcamos en el territorio nacional, buena parte de los productos de la cesta básica, no pueden insistir en aquello del “desarrollo endógeno”; por consiguiente, si son avispados, deben reconocer que si no dan el viraje necesario y a tiempo, se hunden y con ellos, el país entero; por eso creo, han optado por una salida política lógica.

Ellos han de saber que China sobrevive al socialismo porque hombres como Deng Xiao Ping en 1979, pudieron guiar al país y superar la crisis política y social engendrada por la llamada “Revolución Cultural”, maoísta, al ocurrírsele entre otras posibles cosas, para salvar a su pueblo, la brillante idea de abrir las puertas al capitalismo industrial.

          ¡Guao!, mi amor, indica Rosa, dime algo, ¿Tú estás recibiendo clases de Historia o de economía política?, ¿No nos digas que te inscribiste en la Bolivariana?, Tú eres muy capaz de eso y te estás haciendo la loca con nosotras.

          Interviene Petra y señala, ¡Mijiticas!, lo que yo puedo decir con relación a Esteban de Jesús, es que me parece verlo aplicar una política así como sincera.

¿Qué vaina es “política sincera”?, pregunta Rosa y dirigiéndose a Petra la interroga: ¿Tú como que estás comprometida con el proceso?, porque esa es la manera como ellos se expresan y una no entiende nada.

Que yo sepa, política es política, pero, más allá de la lógica que debe prevalecer en ella,  según la circunstancia histórica, eso de “sincera”, no lo entiendo para nada; cuando la política tenga como propósito la sinceridad, caen muertos los políticos, y continúa.

¡Por Dios, Petra!, háblame de trampas, de maquiavelismo, de artimañas, pero, no de sinceridad,  ¿o tú acabas de inventar ese término?

Les voy a señalar un ejemplo, para que me entiendan, expresa Petra; Yo creo que cuando el señor Presidente, encargado o juramentado, como ustedes quieran llamarlo, confirma  que su Gobierno está persiguiendo a los 900.000 empleados oficialistas que asegura no votaron por él en los comicios del 14 de abril, tal como lo informa El Nacional de hoy, a mi entender, eso es sinceridad política y eso me parece un gesto bellísimo.

Amiga Petra, expone Josefina, definitivamente, si no eres parte del “poceso” como dice Zapata en sus caricaturas, estás más extraviada que el loco del cementerio; tú no caes hijita en que esa actitud del Gobierno va en contra de la Constitución y el secreto del voto; eso no te sugiere que continuaremos presenciando una política de amedrentamiento e imposiciones; que por un lado aparentan recoger banderas en relación a la política dictatorial y las expropiaciones, pero organizan invasiones a la propiedad privada como ha ocurrido en El Hatillo, donde autobuses con el logo PDVSA, llevaron a los invasores hasta “El Cigarral”.

Simplemente, veo en esa actitud, una respuesta maquiavélica, hacen ver que están cambiando porque se lo imponen las necesidades existentes en el país, relacionadas con la baja productividad, eso los obliga aparentar un supuesto viraje político en un país, donde las únicas cosas que suben cada día, son todas adversas: la inflación, la devaluación de la moneda, la escasez de productos de la cesta básica, las importaciones, los deseos de poder y algunas otras pendientes.

¡Ah!, olvidaba mencionar la delincuencia que parece responder directamente proporcional al número de guardias nacionales y policías, distribuidos en parte de la Gran Caracas.

Permite interrumpirte un momento, dice Petra, Gracias a Dios que el Gobierno ha complementado esa “acción innegable” de nuestros “servidores públicos”, con la misión  “A Toda Vida Venezuela” y su programa “Patria Segura” y por si fuera poco, allá en la Urbina, en las cercanías de Petare, motivados por todos los logros de la política referenciada, se ha creado “Camino Seguro”. Pero, eso no se queda ahí, todo Maracaibo, Barquisimeto, todo el estado Carabobo y otras tantas ciudades que vendrán después, serán inundados con héroes anónimos que velarán por la paz. ¿No es esto hermoso, muchachas?

Por fin, se acabará con la delincuencia en el país, ¡Qué maravilla!, ¿Dios es muy grande!, no obstante, ya verán como aparecen los críticos de siempre  negándole los créditos al Gobierno, por eso es que no salimos de abajo.

Por lo visto, amiga Petra, continúas emocionándote con los supuestos cambios políticos y directrices del Gobierno; no podemos hacer nada contigo, pero, de todo hay en la viña del Señor, comenta Josefina.

Viéndolo desde ese punto de vista, dice Rosa a Josefina, tú pareces tener razón, el problema es que yo, de política sé poco y por eso no gusto opinar, porque siempre me equivoco; ahora, caigo, se muestran blandengues con algunos grandes productores, porque tienen necesidad de hacerlo; son muy capaces de estimularlos para la inversión y después, cuando las cosas logren emparejarse, si es que eso llega a suceder, volverán con su política expropiadora porque no olvidemos que se hace publicidad política al “Plan de La Patria”; la herencia del padre, mijita, la herencia del padre.

Y prosigue: con razón he observado que la nueva Ley del Trabajo se aplica al pie de la letra, para la empresa privada y se le obliga a cumplir con el decreto reiterado sobre la inamovilidad laboral; no así, con las del Estado, donde botan gente como si fuese basura o por castigo, siempre y cuando se sospeche que “traicionaron” al supuesto hijo del Comandante; ¡Na guará!, ¿y pa’ dónde corremos? Mejor nos vamos, hasta mañana.
  
          RAMÓN SANTAELLA YEGRE

No hay comentarios: