LEGENDARIAS
BANALIDADES
MIGUEL APONTE
Zapata nos dejó esta
frase plena de verdad e ironía: “Dudo mucho que gente que no supo manejar la
victoria (que es tan fácil) de repente sepa manejar la derrota (que es tan
difícil)”. Freud, por su lado, escribió, mezclando ironía y lógica, que “las
antítesis no equivalen siempre a una contradicción”. El desprecio de estas
“legendarias banalidades” y otras reglas de convivencia adulta está en el
núcleo del fracaso chavista. Ni lógica ni verdad interesan a la izquierda del
sXXI.
Mire usted lo que
opina Iglesias desde España respecto a los presos políticos en Venezuela: hay
que distinguir, dice, entre “presos políticos” y “políticos presos”, siendo los
venezolanos de la segunda categoría, razón por la cual Ledezma, Leopoldo,
nuestros estudiantes y tantos otros están bien presos, según él.
Pero, ¿por qué frente
al chavismo se siente uno -no hablamos de Iglesias, sino de los tontos útiles
de siempre- como frente a niños? Creen de “verdad” que el mundo es como ellos
lo imaginan y no entienden algo básico: que nadie posee tal privilegio. Ignoran
que oponer no es contradecir y por eso una vez en el poder terminan
inevitablemente haciendo peor todo aquello que criticaron, pues los opuestos
muchas veces son iguales.
Si yo frente a quien
detenta el poder lo único que opongo es que quiero ejercerlo yo, ¿cuál es la
novedad que traigo? Por esto, la tragedia ocurre cuando lo que más detestamos
en el adversario se manifiesta aún peor en nosotros si se da la oportunidad.
Ahora bien, ¿qué es un
adulto psíquico? Alguien que sabe que la realidad no es lo que él quisiera y no
se frustra por eso, distingue aquello que puede cambiar y trabaja para
cambiarlo; sabe que sus propósitos, además, se modificarán en el camino y no se
acompleja ni se fanatiza, sabe que está siempre entre dos extremos, pero nunca
en ellos, pues ni todo está “escrito” ni todo es “imposible”.
Un adulto así, sin
embargo, es lo que menos conviene al mundo chavista, donde la política muere en
el altar totalitario y usted es seguidor o es perseguido.
Miguel Aponte
05 junio 2016
No hay comentarios:
Publicar un comentario