En uno de los debates que se realizan en la Red Internacional del Colectivo (RIC), bajo el auspicio de la Cátedra “Pio Tamayo” de la Universidad Central de Venezuela (UCV), plantee para la discusión que es incorrecto satanizar la posibilidad de instaurar en Venezuela un sistema socialista, menos aún si se sustenta en teorías socio-económicas, filosóficas y ético-culturales orientadas a la eliminación de las causas que originan las diferencias y los conflictos que existen entre sus clases sociales, posibilitando la transformación de la racionalidad dominante, signada por los anti-valores del egoísmo, el oportunismo, el burocratismo, el autoritarismo, la corrupción, el fetichismo y el reduccionismo de la totalidad en sus partes constituyentes, por una visión integral de la vida que sirva para el desarrollo de una sociedad de iguales y auto-sostenible, es decir sustentada en concepciones pluralistas, éticas y morales, dialógicas y comunitarias, cuyo objetivo final sea alcanzar el bienestar común, la justicia, la equidad, la solidaridad y la libertad de la gente, independientemente de sus diferencias sociales, raciales, de género, aptitudes físico-motoras, creencia religiosa, acervo histórico-cultural, actitud político-ideológica o militancia partidista.
Bajo esta prospección es que sitúo el advenimiento del Socialismo como la alternativa frente a su contraparte: el Capitalismo; por ser el único sistema socio-político, económico-social y ético-cultural capaz de generar los proceso-respuestas necesarios para alcanzar dicho objetivo. La gran pregunta a responder sería: ¿Qué se debe hacer para lograrlo y no morir en el intento?, o también ¿Cómo lograr que el socialismo triunfe y se consolide como un sistema auto-sostenible? Lo más probable es que nadie tenga una fórmula específica para lograr lo que hasta ahora ha sido catalogado como una utopía.
No obstante, es interminable la lista de autores que han propuesto ideas con base en las cuales pudieran desarrollarse iniciativas muy interesantes al respecto. En esta oportunidad, me apoyaré en tres propuestas para fundamentar mi visión del Socialismo como sistema alternativo al Capitalismo.
En primer término, es inaplazable la adopción de los principios clave de la Educación Holística, formulados por la UNESCO, toda vez que en ellos están implícitos tres aspectos cruciales para la consolidación de un Estado Democrático con una visión hacia el Socialismo, a saber:
A) Integridad educativa, ya que la formación de un ser humano debe ser integral, no compartimentada en materias ni orientada a fines específicos, porque todo en la vida está unido e interconectado;
B) Desarrollo de los procesos del “Ganar-Ganar” en la educación, porque cada ser humano gana en la medida de la ganancia de otro, de allí la necesidad de comprender la relación de la unidad dentro de la diversidad y de la igualdad dentro de la pluralidad, excluyendo toda posibilidad de confrontación entre las personas, ya que todos deben ser ganadores, no competidores y
C) Desarrollo de una nueva moral ciudadana cuya escala de valores no esté representada por el poder económico, militar y político, ya que en la cultura dominante ellos son los generadores de otros subvalores asociados con la producción de dinero, riqueza, obediencia a los poderes y consumos de lujo.
En segundo lugar, reitero lo que el Dr. Araya Monge (2006), en su obra sobre “El Socialismo Cuántico”, señala como las condiciones básicas para propiciar los procesos transformadores de la mentalidad y la cosmovisión dominante, tales como:
1) Orientar la investigación científica a fines humanistas y no a objetivos militares y mega-industriales.
2) Desconcentrar el ejercicio del poder político en todos los niveles gubernamentales, facilitando la independencia de los poderes públicos en el ejercicio de sus competencias y toma de decisiones.
3) Descentralizar al máximo la administración de los recursos económicos y financieros, por parte de los entes gubernamentales, transfiriéndolos a las comunidades organizadas para la ejecución de planes, proyectos u obras en función de su desarrollo endógeno auto-sostenible.
4) Propiciar la contraloría social de la gestión de gobierno realizada por los entes del Estado porque ello contribuiría a consolidar la estabilidad de un Estado Democrático, en transición a un Socialismo propiamente dicho.
Por último, me referiré al análisis realizado por Javier Bierdau (El Nacional 22/08/08, sección “A Tres Manos”), del cual extraigo tres aspectos que son importantes para esta reflexión, esto es:
I) No hay socialismo factible sin la revolución democrática ya que es necesario saber distinguir entre quienes plantean una interpretación autoritaria de la hegemonía de aquellos que realizan una interpretación democrática del término hegemonía.
II) La democracia socialista, como transición hacia el Socialismo, implica ir más allá del liberalismo democrático. No entender esto conlleva, inexorablemente, a la anulación de la democracia, para reforzar un patrón regresivo que vulnera derechos históricos fundamentales.
III) La democracia socialista debe ser radicalizada por medio del consenso ético-cultural y no liquidarla a través de las estructuras de dirección y control partidista, también denominadas “cúpulas político-militares” o “democracia de consejos”, porque éstas a la larga terminan monopolizando decisiones que entorpecen el desarrollo y consolidación de un Estado Democrático.
Y usted, amigo lector: ¿Qué opina?, ¿Está de acuerdo con el análisis que le he presentado?, ¿Piensa que Chávez y su gobierno nos llevarán a la conformación de una democracia socialista y de allí a un sistema socialista como lo prefiguran las Ideas-Fuerza antes discutidas?, ¿Cree usted que estos criterios están contenidos en el espíritu, propósito y razón de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela? Entonces, ¿Por qué Chávez los desconoce, violándolos flagrantemente? Los convoco al debate y la reflexión.
E-mail: Jaimes@ula.ve
Dr. Edgar Jaimes, Prof. Titular Jubilado, del NURR-ULA
Bajo esta prospección es que sitúo el advenimiento del Socialismo como la alternativa frente a su contraparte: el Capitalismo; por ser el único sistema socio-político, económico-social y ético-cultural capaz de generar los proceso-respuestas necesarios para alcanzar dicho objetivo. La gran pregunta a responder sería: ¿Qué se debe hacer para lograrlo y no morir en el intento?, o también ¿Cómo lograr que el socialismo triunfe y se consolide como un sistema auto-sostenible? Lo más probable es que nadie tenga una fórmula específica para lograr lo que hasta ahora ha sido catalogado como una utopía.
No obstante, es interminable la lista de autores que han propuesto ideas con base en las cuales pudieran desarrollarse iniciativas muy interesantes al respecto. En esta oportunidad, me apoyaré en tres propuestas para fundamentar mi visión del Socialismo como sistema alternativo al Capitalismo.
En primer término, es inaplazable la adopción de los principios clave de la Educación Holística, formulados por la UNESCO, toda vez que en ellos están implícitos tres aspectos cruciales para la consolidación de un Estado Democrático con una visión hacia el Socialismo, a saber:
A) Integridad educativa, ya que la formación de un ser humano debe ser integral, no compartimentada en materias ni orientada a fines específicos, porque todo en la vida está unido e interconectado;
B) Desarrollo de los procesos del “Ganar-Ganar” en la educación, porque cada ser humano gana en la medida de la ganancia de otro, de allí la necesidad de comprender la relación de la unidad dentro de la diversidad y de la igualdad dentro de la pluralidad, excluyendo toda posibilidad de confrontación entre las personas, ya que todos deben ser ganadores, no competidores y
C) Desarrollo de una nueva moral ciudadana cuya escala de valores no esté representada por el poder económico, militar y político, ya que en la cultura dominante ellos son los generadores de otros subvalores asociados con la producción de dinero, riqueza, obediencia a los poderes y consumos de lujo.
En segundo lugar, reitero lo que el Dr. Araya Monge (2006), en su obra sobre “El Socialismo Cuántico”, señala como las condiciones básicas para propiciar los procesos transformadores de la mentalidad y la cosmovisión dominante, tales como:
1) Orientar la investigación científica a fines humanistas y no a objetivos militares y mega-industriales.
2) Desconcentrar el ejercicio del poder político en todos los niveles gubernamentales, facilitando la independencia de los poderes públicos en el ejercicio de sus competencias y toma de decisiones.
3) Descentralizar al máximo la administración de los recursos económicos y financieros, por parte de los entes gubernamentales, transfiriéndolos a las comunidades organizadas para la ejecución de planes, proyectos u obras en función de su desarrollo endógeno auto-sostenible.
4) Propiciar la contraloría social de la gestión de gobierno realizada por los entes del Estado porque ello contribuiría a consolidar la estabilidad de un Estado Democrático, en transición a un Socialismo propiamente dicho.
Por último, me referiré al análisis realizado por Javier Bierdau (El Nacional 22/08/08, sección “A Tres Manos”), del cual extraigo tres aspectos que son importantes para esta reflexión, esto es:
I) No hay socialismo factible sin la revolución democrática ya que es necesario saber distinguir entre quienes plantean una interpretación autoritaria de la hegemonía de aquellos que realizan una interpretación democrática del término hegemonía.
II) La democracia socialista, como transición hacia el Socialismo, implica ir más allá del liberalismo democrático. No entender esto conlleva, inexorablemente, a la anulación de la democracia, para reforzar un patrón regresivo que vulnera derechos históricos fundamentales.
III) La democracia socialista debe ser radicalizada por medio del consenso ético-cultural y no liquidarla a través de las estructuras de dirección y control partidista, también denominadas “cúpulas político-militares” o “democracia de consejos”, porque éstas a la larga terminan monopolizando decisiones que entorpecen el desarrollo y consolidación de un Estado Democrático.
Y usted, amigo lector: ¿Qué opina?, ¿Está de acuerdo con el análisis que le he presentado?, ¿Piensa que Chávez y su gobierno nos llevarán a la conformación de una democracia socialista y de allí a un sistema socialista como lo prefiguran las Ideas-Fuerza antes discutidas?, ¿Cree usted que estos criterios están contenidos en el espíritu, propósito y razón de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela? Entonces, ¿Por qué Chávez los desconoce, violándolos flagrantemente? Los convoco al debate y la reflexión.
E-mail: Jaimes@ula.ve
Dr. Edgar Jaimes, Prof. Titular Jubilado, del NURR-ULA
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